El cantalien es un hombre que viaja, tal vez más que ahora. Él va por el trabajo donde está. El cantón de Pleaux es interesante a este respecto. Hay muchos ejemplos. Habitantes de Chaussenac que se van hacia el norte y los Países Bajos, los de Pleaux y St Christophe que también hacen hacia España.
Hacia el norte, llegamos a París o continuamos hasta la frontera belga o hasta hasta los Países Bajos. Nos establecemos en la capital como repartidor de agua, luego carbonero o carbonero vendedor de vinos antes de hacerse, al siglo XX, patrón de bar. Los naturales el Macizo están, hoy todavía, los más numerosos en término de comunidad, en el dominio de la restauración y bares.
********* Desde el fin del siglo XVII, los emigrantes del Macizo Central habían colonizado París. Ellos brillaban en todos los trabajos duros y fatigosos a los que los parisinos hacían ascos. El agua corriente todavía no existía y los parisinos consumían cada vez más agua: "Auverneses " aguadores les trajeron el agua a domicilio. [] pero en consecuencia de los trabajos del barón Haussmann las aguas de la Compuerta y de Dhuys llegan a París y a todos los pisos. [] pero nada para la imaginación Auvernesa. Los(las) ricos(as) aspiran a lavarse más pero no tienen las instalaciones necesarias, los antiguos aguadores van a traer agua caliente. [] la profesión fría o caliente de aguador que periclita los Auverneses van a readaptar en el carbón. [] ellos van entonces o sea a agregarlo a su comercio de carbón, o sea consagrarse a a eso totalmente. Extraídos de uno de los artículos de Jean Monange.
*** ¿Por qué París? Pero porque es el asiento del Poder, la capital, el centro de los asuntos, allí donde "todo " se hace. Así, el migrants parados en la región Centra o habiendo proseguido hacia el norte de la Francia, tenían París para en absoluto común: era el mismo camino.
Para que la comunidad auvernesa no "desmantele ", nos reunimos. Un día, alguien tiene la idea de crear un periódico para los Auverneses. Él lo bautiza " l'Auvergnat " (el Auvernés ). Y él existe siempre (desde el 1882).
Este hombre, que ha tenido esta buena idea, no se fijó en este ensayo. Había hecho lo que nosotros appelerions de " Lobbying " cerca de una de las compañías de los ferrocarriles (estamos bien antes de 1938, y la CNFF todavía no existen). Él obtiene rebajas interesantes para los que desean volver al país por este medio. Y así como son numerosos a quererlo y a hacerlo, apodamos los trenes del nombre de este personaje: Bonnet (de donde los " trenes Bonnet "). Y sí, es Señor Louis Bonnet, nativo de Aurillac, quien permití al cantalous parisino acercarse al "país ".
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